El flan, con su textura suave y dulce sabor, es un postre que conquista paladares en todo el mundo. Su preparación, aunque requiere tiempo y paciencia, es todo un ritual gastronómico que vale la pena disfrutar.
El flan es un postre cremoso que cautiva con su suavidad y sabor delicado. Su preparación exige paciencia y cuidado, desde el caramelo hasta el momento de hornearlo en baño María.
Una vez refrigerado, revela su textura esponjosa y sedosa, listo para deleitar a aquellos que lo prueban.
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Flan
Ingredientes
1 taza de Azúcar morena
4 Huevos
1 lata de Leche condensada
1 lata de Leche evaporada
2 cucharas de Extracto de vainilla
Preparación
Paso 1 : En una cacerola a fuego bajo, se coloca el azúcar y se calienta hasta que tome una tonalidad dorada.
Paso 2 : Se debe mantener la temperatura baja para evitar que el caramelo se queme.
Paso 3 : Una vez listo, se vierte el caramelo en el fondo de un molde refractario redondo y se reserva.
Paso 4 : Los demás ingredientes se licuan por 2 minutos y luego se vierten sobre el molde con el caramelo ya en él.
Paso 5 : El siguiente paso es colocar el molde con la mezcla dentro de otro molde con agua, creando así un baño María.
Paso 6 : Posteriormente, se hornea a 180 °C por aproximadamente una hora o hasta que la mezcla esté firme.
Paso 7 : Una vez cocido, se retira el molde del horno y se deja enfriar a temperatura ambiente por 30 minutos o hasta que esté fresco.
Paso 8 : Luego se refrigera por 1 hora antes de desmoldar, lo cual facilitará el proceso y le dará más firmeza al postre.
Paso 9 : Finalmente, se sirve y se disfruta este delicioso postre preparado con cariño.
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